Las cosas se definen en casa.

Hoy, a las 15.30 se enfrentó la 4ta división con Empalme San Vicente.
Racing salió a la cancha con su clasico 4-4-2, con Sala F. en el arco, Bianchi, Sala.j, Aguirre y Salgado se encargaron de la parte defensiva, Ocampos, Romero, Cabezas y Turi estuvieron en la parte media y los delanteros fueron Bergaglio y Guelfo.
Fue un partido muy trabado, donde quizás Racing mereció algo más, pero solo se tuvo que conformarse con el empate en el último minuto de la mano de Ocampos.
En el primer tiempo estuvo para los dos, Racing con la velocidad de Ocampos, Guelfo y Bergaglio complicaba a la defensa contraria, pero nunca con la contundencia suficiente para concretar un gol.
Mientras que San Vicente respondía por medio de la habilidad del 10 y el 11, que siempre provocaban faltas cerca del área. Fue asi que tras una falta llegó el gol, un tiro libre en la puerta del área, que al principio parecía controlable para Franco, pero la desviaron en el camino y el conjunto de la Dupla se tuvo que ir al vestuario con el marcador en negativo.
En el segundo tiempo se vió un cambio total en el equipo baviense, a los pocos minutos entró Antonio por Bianchi para sumar gente al ataque, también entraron Aguirre y Aguilar.
Racing buscaba con la velocidad de los puntas, mas el buen juego de Romero y Cabezas, fue asi que hubo tiros muy cerca de los palos, un tiro en el travesaño de Guelfo que era un gol claro, más algunos mano a mano desperdiciados por los delanteros. Despues de tanto intentar, cuando el arbitro habia adicionado 4 minutos, tras un buen centro de Cabezas y una serie de rebotes, los jugadores de Empalme la quisieron rechazar, pero se encontraron con la oposición de la pierna de Ocampos, esto significó el empate de Racing y la obtención de un buen resultado teniendo en cuenta que la vuelta es en Bavio y es ahí donde se hace fuerte el conjunto de la dupla.
Para destacar, la muy mala conducta de los pibes de San Vicente, que durante todo el partido agredieron con piñas, codazos y patadas a los jugadores Racinguistas, que fieles a su forma de ser, nunca reaccionaron.
Ahora la dupla tendrá que trabajar mucho, pensando en la vuelta en su cancha, donde tiene grandes chances de ganar, dependen pura y exclusivamente de sí mismos.